- Iván Delgado Sánchez
Review de la temporada 1 de Taboo
Revisando las series que sigo y cuándo estrenaban nuevos capítulos, me di cuenta de que Taboo había terminado su primera temporada. Había sido tan insípido su final, que he estado un rato buscando en Internet si realmente había acabado ahí la temporada y no se trataba de un parón. Desgraciadamente, sí ha acabado. O no tan desgraciadamente.
Taboo es una serie que estrenó HBO a principios de este año, 2017, con Tom Hardy como protagonista y principal reclamo. Con un estilo muy a lo Peaky Blinders, nos presentaba a James Kaziah Delaney (Tom Hardy), un hombre dado por muerto que vuelve a la Inglaterra de 1814 tras la muerte de su padre. La serie trata las negociaciones de James Delaney con la Compañía Británica de la India Oriental (East India Company), la Corona de Inglaterra y Estados Unidos por los territorios de Nutka, claves en la guerra entre estos países y en propiedad del protagonista por herencia de su padre.
Desde el primer capítulo, se nos muestra la que es posiblemente la gran diferencia con el resto de series de este tipo, y es que el protagonista tiene ciertos poderes relacionados con la nigromancia y los muertos. A mi parecer, esto debería haber sido mucho más explotado en esta primera temporada ya que habiendo acabado esta, aún no me han quedado claro las capacidades de James Delaney. Algo que podría haber alejado a esta serie de las comparaciones con Peaky Blinders, es desaprovechado de manera brutal, dejándote una vez más con una sensación de indiferencia.
Más de esto y menos negocios e inglesitos.
La historia avanza de forma lenta aunque te mantiene con intriga, lo que no evita que se haga algo confuso el objetivo del personaje ya que los planes del protagonista no se clarifican en ningún momento y la temporada acaba con sus problemas resueltos de la forma en que supuestamente él tenía pensado. Y nosotros tenemos que creérnoslo.
La ambientación es muy buena. Peinados, vestuario, escenarios, incluso en los dientes (algo que no se tiene mucho en cuenta en las series históricas). El tono sucio de cada capítulo transmite perfectamente la situación de Inglaterra durante el fin de la época colonial.
Tiene un elenco más que interesante del que destaca la actuación de Tom Hardy como viene siendo habitual: sus personajes violentos y con carácter son siempre maravillosos (para mí cada vez es mayor candidato a ser el próximo Lobezno) aunque quizás empieza a encasillarse. Los secundarios no son malos aunque tampoco serán recordados por su carisma. Entre ellos destacan Sir Arthur Stuart (Jonathan Pryce) como gran 'villano' así como Lorna Bow (Jessie Buckley) y Brace (David Hayman).
La serie se centra demasiado en los detalles y todo lo demás queda a medio camino. Una miniserie que, si la hubiesen concentrado en estos 8 capítulos o simplemente haber alargado la temporada, habría dado mucho más de sí que la historia inacabada que deja este season finale.
Se lleva algo más que el aprobado por la ya mencionada actuación de Tom Hardy y la ambientación pero me deja muy decepcionado el resultado final. Esperemos que se arregle cuando se cierre la trama en la siguiente temporada.